Quizás a todos los que sueñan con perder peso también les gustaría mejorar su salud.
Resulta que estos dos objetivos se pueden lograr con la ayuda de la Omni-dieta, cuyo autor es la enfermera estadounidense Tana Amen.
Según ella, si sigues este sistema nutricional, no sólo dirás adiós a los depósitos de grasa (hasta 6 kg en 2 semanas), sino que también beneficiarás a tu corazón, vasos sanguíneos y cerebro.
Amen divide todos los productos en 3 grupos: permitidos, prohibidos y permisibles. Si, por regla general, no surgen dudas con las dos primeras categorías, entonces la última categoría significa que estos productos se pueden comer, pero sólo en pequeñas cantidades.
Los permitidos en la omnidieta incluyen verduras sin almidón, carnes magras, pescados y mariscos, aceites de oliva y otros aceites sin refinar, semillas, nueces y huevos.
Puedes beber leche vegetal y té verde.
Se permiten frutas y cereales sin gluten (arroz integral, trigo sarraceno, quinua) y legumbres. En el caso de los dulces, puedes darte un capricho con miel y, de vez en cuando, disfrutar de una taza de café.
No se puede comer todo lo demás; en primer lugar, la prohibición se aplica a la comida rápida, las salchichas y los productos semiacabados. El tabú se aplica al azúcar blanco, las patatas, el pan de harina blanca, las carnes grasas y los lácteos.
La dieta omnidieta debe consistir en un 90% de alimentos aceptables (70 de los cuales están permitidos y 30 son permisibles), y el 10% restante se puede gastar en alimentos "prohibidos".
La duración de la dieta es de 3 etapas de 2 semanas (en total 6 semanas). Cada uno de ellos te permite decir adiós a los 5-6 kilos de más.
La primera fase, la entrada, implica abandonar el azúcar, los alimentos grasos y los carbohidratos rápidos y centrarse en las verduras, las frutas y las proteínas.
La segunda fase permite una serie de relajaciones: puedes “darte un capricho” con una pequeña porción de chocolate o beber una taza de café extra. En general, la dieta es la misma que para la primera fase.
Finalmente, es necesaria una tercera fase para consolidar los resultados obtenidos.