No todas las limpiezas deben tirarse a la basura.
Por ejemplo, las patatas peladas serán un ingrediente excelente para hacer patatas fritas crujientes.
Lo principal es que antes de empezar a cocinar, debes lavar bien los tubérculos con agua corriente y frotar los lugares de difícil acceso con un cepillo suave.
Una vez que te deshagas de la tierra adherida, puedes empezar a limpiar con la conciencia tranquila.
Espolvorea la cáscara retirada con aceite de oliva y sazona con tus especias favoritas para futuras patatas fritas.
Una excelente opción sería una mezcla de hierbas italianas, pimentón ahumado o ajo seco.
No olvides agregar sal, después de lo cual debes mezclar todo el contenido del recipiente y colocarlo en una bandeja para hornear. Hornea las patatas fritas en el horno hasta que estén crujientes.
Tenga en cuenta que las cáscaras verdes no son adecuadas para hacer patatas fritas.