Las chuletas son una excelente opción no solo para la cena diaria, sino también para un banquete festivo.
Sin embargo, no todas las amas de casa pueden preparar este plato para que quede tierno y jugoso.
Si eres uno de ellos, es hora de dar un suspiro de alivio: hoy te revelaremos un ingrediente secreto que hará que incluso los invitados más exigentes pidan más.
Y estamos hablando de mantequilla, que hace que las chuletas sean más sabrosas y les da un sabor cremoso inolvidable.
Y, por supuesto, el plato terminado resultará inusualmente tierno y jugoso.
Puedes incluir este componente en cualquier carne picada, pero el aceite combina especialmente bien con chuletas de pechuga de pollo o pescado.
Por cada kilogramo de carne picada necesitarás unos 100 g de mantequilla.
Importante: es necesario utilizar un producto congelado, triturado con un rallador.