Desde la infancia, a muchas personas se les enseña a comer sopa una vez al día. Al parecer, de ello depende la digestión y la salud del tracto gastrointestinal.
Pero si acude a un especialista para pedirle un comentario, resulta que a una persona no le pasará nada malo si rechaza la sopa.
De hecho, evitar por completo las sopas no daña la salud humana, dijo a NEWS.ru la nutricionista Sofia Kovanova.
De todas las consecuencias pronunciadas, el nutricionista sólo habla de pérdida de peso.
Pero no se deben esperar las consecuencias negativas de las que se habla comúnmente en la sociedad.
El hecho es que los primeros platos se consideran alimentos bastante ricos en calorías.
Especialmente si cocinas la sopa en un caldo graso y usas carne grasa.
Agregar patatas, sin las cuales casi ninguna receta está completa, hace que la sopa sea aún más pesada en términos de calorías.
Y si tomamos como ejemplo el borscht o la sopa de repollo, su presencia en la dieta diaria no nos permite llamarlo saludable, está convencido el nutricionista.