El insomnio, también conocido como “insomnio”, es un problema bastante común entre personas de diferentes géneros y edades.
¿Sabías que el insomnio se puede dividir en 3 tipos principales? El criterio de diferenciación es el curso de la enfermedad.
Transitorio (agudo)
Si los problemas para dormir no duran más de una semana y su causa es una fuerte excitación emocional, que, por cierto, puede ser provocada tanto por un evento alegre como triste, podemos hablar de insomnio transitorio.
El mismo tipo de insomnio puede ocurrir cuando se duerme demasiado ligero bajo la influencia de estímulos externos como iluminación, temperatura incómoda, ruido, etc.
A veces se observa insomnio agudo como consecuencia de alteraciones en los patrones de sueño-vigilia o desfase horario.
Corto plazo
Este tipo de insomnio puede privarte del sueño durante un periodo de una semana a un mes y suele estar provocado por una situación estresante más grave como la muerte de un ser querido, una mudanza de casa, etc.
A veces, la causa del insomnio a corto plazo son las enfermedades crónicas: órganos internos, corazón y vasos sanguíneos, etc.
Crónico
Este tipo de insomnio puede durar más de un mes y, en la mayoría de los casos, es “compañero” de una enfermedad somática o mental.
El insomnio crónico puede ser causado por el consumo de drogas, abuso de cafeína, etc.
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