La mayoría de la gente intenta excluir el pan de su dieta, creyendo que contribuye al aumento de peso.
¿Es todo tan obvio en esta situación? Por lo tanto, vale la pena entender qué tipo de pan, según los nutricionistas, es saludable y definitivamente vale la pena agregarlo a su dieta.
grano entero
Uno de los principales criterios por los que los nutricionistas evalúan la utilidad del pan es su composición.
El pan integral, elaborado con harina integral, ocupa una posición de liderazgo.
Contiene todas las partes del grano, incluidas:
• salvado;
• endospermo;
• embrión.
Todo ello aporta altos niveles de fibra, vitaminas del grupo B y minerales.
El pan integral ayuda a mejorar la digestión, estabilizar los niveles de azúcar en sangre y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Pan de centeno con masa madre
El centeno contiene más fibra en comparación con el trigo y la masa madre aumenta la cantidad de bacterias beneficiosas en los intestinos, mejorando su microflora.
El pan de centeno también tiene un índice glucémico bajo, lo que lo hace ideal para quienes controlan sus niveles de azúcar.
Sin gluten
La base de este tipo de pan suele ser harina de arroz, maíz o trigo sarraceno.
Los nutricionistas enfatizan la importancia de elegir panes sin gluten con ingredientes integrales para garantizar que su cuerpo obtenga suficiente fibra y nutrientes.
Sin levadura
Cuando el pan se elabora sin utilizar levadura, es otra opción que los nutricionistas consideran saludable.
Se suele preparar con masa madre, lo que la hace más fácilmente digerible y mejora la digestión.
Pero es importante recordar que elegir pan de alta calidad elaborado con esta tecnología no es fácil.
Anteriormente te contamos por qué está mal decir que la carne de cerdo no tiene cabida en una dieta saludable.