Muchas personas que están adelgazando están seguras de que el éxito de la operación está directamente relacionado con los carbohidratos consumidos.
¿Por qué estos mismos carbohidratos se encuentran a diez centavos la docena? Así es, ¡en pan!
Por eso "Borodinsky" no aparece en la mesa de quienes sueñan con una cintura delgada.
Sin embargo, el hábito es algo duro, por lo que renunciar al pan seguramente va acompañado de un tormento emocional insoportable.
Además, para algunos, una comida sin pan no se considera nada completa.
¿Qué hacer en tal situación? La respuesta es simple: cuando intente perder peso, minimice el consumo de harina blanca premium/de primera calidad y, en consecuencia, de los productos elaborados con ella.
Tenga en cuenta: no debe eliminarse por completo, sino solo minimizarse, y solo porque contiene una pequeña cantidad de nutrientes.
No se puede imaginar una dieta saludable sin carbohidratos, entre los que se encuentra el pan.
La conclusión es simple: al perder peso, no solo se puede comer pan, sino también pasta y cereales.