Una fiesta festiva con abundancia de bebidas y platos conlleva un peligro potencial para la figura.
Si no quieres cambiar un vientre plano por un salvavidas alrededor de tu cintura, sigue estas recomendaciones de la tabla.
1. Hornee los alimentos en lugar de freírlos. Si el plato implica cocinarlo en una sartén, utilice utensilios de cocina antiadherentes o una parrilla sin agregar aceite.
2. Evite comer alimentos demasiado salados y picantes.
3. Añade más verduras a tus comidas. Podría ser eneldo, cilantro, perejil, albahaca, diferentes tipos de lechuga y microverduras. De ella, por cierto. Puedes cultivarlo directamente en el alféizar de tu ventana.
4. Reemplace la carne de cerdo con muslo o muslo de pavo, más saludable y menos graso, y las salchichas con aves al horno.
5. Como alternativa a los platos pesados de carne, sirva pescado, conejo y aves.
6. No olvides que las frutas y verduras son el mejor adorno de la mesa y al mismo tiempo el alimento más saludable.
7. Sustituir los vinos dulces y el champagne por vino seco o semiseco.
8. En lugar de jugos y bebidas carbonatadas comprados en la tienda, prepare compotas de frutas y bayas caseras con un mínimo de azúcar.
9. A la hora de preparar postres, utilice un aditivo como la canela. Esta especia, en primer lugar, tiene el olor más propio de Año Nuevo y, en segundo lugar, reduce la concentración de glucosa en la sangre y favorece la pérdida de peso.
10. La comida que planeas comer durante la cena de Año Nuevo debe caber en un plato con un diámetro de 25 cm (sin tobogán).