A pesar de la aparente sencillez de preparación, conseguir un plato realmente sabroso a base de guisantes no es tan fácil.
Los secretos culinarios enumerados en este artículo le ayudarán con esto.
El primer truco se refiere a los primeros platos y consiste en añadir los guisantes a la sartén en cuanto hierva el caldo.
¿Viste que el contenido del plato ha llegado al punto de ebullición? No olvides quitar la espuma y añadir las legumbres a la sartén; mientras se cocina la carne, los guisantes tendrán tiempo de alcanzar el estado de cocción deseado.
Si planeas cocinar gachas, utiliza el segundo "secreto".
Los guisantes crudos se pueden salvar añadiendo un pequeño trozo de mantequilla. Se derretirá y formará una película de aceite en la superficie, que se puede comparar con una "tapa" adicional.
Gracias a este sencillo truco, la temperatura en la sartén aumentará, aunque sea unos pocos grados, lo que sin duda ayudará a que los guisantes hiervan más rápido y mejor.
Si sigues las reglas, puedes estar seguro de que los guisantes quedarán suaves, sabrosos y aromáticos.
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