No todos los pepinos ligeramente salados son fáciles de preparar y quedan deliciosos.
Afortunadamente, esta afirmación no tiene nada que ver con la receta que nos apresuramos a compartir contigo.
El principal "truco" del plato es la miel, que, junto con el ajo, las hierbas y las especias, crea una combinación sorprendentemente sabrosa.
En primer lugar, debes preparar los pepinos lavándolos, secándolos y cortándoles los extremos por ambos lados. Si las verduras son grandes, puedes cortarlas por la mitad.
Ahora puedes empezar a hacer salmuera.
Para un litro de agua fría, agrega 2 cucharadas de sal y 1 cucharadita de miel líquida. Revuelva bien hasta que todos los ingredientes estén completamente disueltos.
Coloque una hoja de rábano picante en el fondo del frasco, agregue 2-3 ramitas de eneldo y 3 hojas de laurel. Puedes agregar un par de guisantes negros y pimienta de Jamaica.
Ahora coloca los pepinos en el frasco y llénalos con salmuera, luego cierra el frasco con una tapa de nailon o de rosca y déjalo en un lugar oscuro a temperatura ambiente durante 2 días.
Pasado el tiempo especificado, traslada el frasco de pepinos al frigorífico. Tan pronto como se enfríen, puedes intentarlo con seguridad.