Usar trucos mientras cocinas puede llevar tu talento culinario al siguiente nivel.
Hoy te invitamos a hablar sobre el aceite de girasol.
1. Mantequilla y champiñones
Si necesita freír champiñones, no se apresure a agregarles aceite inmediatamente.
Si primero intentas freír los champiñones y otros similares en una sartén seca, puedes eliminar el exceso de humedad y darles un tono dorado claro, después de lo cual puedes agregar aceite a los champiñones de manera segura.
2. Mantequilla y dulces
Muchas recetas requieren que midas los ingredientes con una cuchara. Sin embargo, cuando se trata de mantequilla de maní, jarabes y otros líquidos dulces y pegajosos, una parte importante del producto se pega a los cubiertos y no quiere ser sacudido.
Para evitar que esto suceda, primero intente sumergir una cuchara en el aceite; lo principal es que no tiene un sabor ni un olor pronunciados.
3. Aceite y hierbas
La mantequilla con hierbas y especias es mucho más cara que la versión tradicional.
En lugar de comprar un producto de este tipo, intente hacerlo usted mismo. Para hacer esto, debes remojar las hierbas en vinagre y luego transferirlas a una botella con aceite.