No todas las amas de casa consiguen conseguir un hígado sabroso y apetitoso. De hecho, esta tarea es difícil, por lo que debes tener más cuidado.
Si cometes errores, el plato quedará amargo, seco y duro. Entonces, ¿cómo preparar el hígado perfecto que tu familia definitivamente no rechazará?
¿Cómo elegir un producto de calidad?
Recuerde que los despojos de baja calidad definitivamente no serán una deliciosa obra maestra culinaria. Por eso presta atención a estos puntos a la hora de elegir hígado en el mercado o en una tienda:
• compre un ingrediente frío, porque el hígado congelado no es tan sabroso y su textura se resiente;
• si el producto es fresco, desprenderá un olor dulzón, pero el hígado, que desprende un olor agrio, definitivamente ha comenzado a deteriorarse;
• el color de la superficie del ingrediente debe ser uniforme, las manchas y áreas secas son inaceptables;
• presione ligeramente el hígado para asegurarse de que el hoyuelo que aparece desaparezca rápidamente;
• no compre despojos que sean de color demasiado claro o demasiado oscuro.
Ahora vale la pena entender las características de los diferentes tipos de hígado. Entre los puntos más importantes:
• Hígado de res. Tiene una cáscara bastante densa. Incluso si lo cocinas correctamente, el plato quedará duro.
• Hígado de ternera. Tiene un tinte rojo claro o marrón. Estas obras maestras culinarias deleitan con su ternura y suavidad.
• Hígado de cerdo. Tiene alto contenido en grasas. Este hígado es suave y tierno, pero tiene un ligero sabor amargo.
• Hígado de ave. Tiene un color marrón uniforme. La superficie de dicho hígado es lisa. Este producto produce las obras maestras culinarias más tiernas y perfectamente jugosas.
Debes considerar cuidadosamente la elección del ingrediente. Sólo en este caso la comida será realmente placentera y el hígado se convertirá en su plato estrella.
¿Cómo cocinar el hígado para que quede tierno y suave?
Desafortunadamente, cocinar hígado de res y cerdo causa muchos problemas a las amas de casa. Pero existen algunos trucos sencillos que te ayudarán a conseguir un plato increíblemente sabroso y muy tierno en tu cocina.
Eliminar todas las venas y películas.
Limpiar el hígado de res de la película dejando primero el producto en un recipiente con agua tibia durante diez minutos. Si hablamos de despojos de cerdo, hay que mantenerlos en agua hirviendo durante treinta segundos. Gracias a esta técnica podrás deshacerte de forma muy rápida y sencilla de la fina película que se encuentra en la superficie del producto. Quitar también las venas, ya que son las que provocan que el hígado terminado tenga un sabor amargo.
Adobo para el hígado
Asegúrese de marinar previamente el producto en un ambiente ácido para que la obra maestra culinaria lo deleite con su suavidad. Puedes usar jugo de limón o vinagre de mesa normal. Diluir el ingrediente seleccionado con agua y colocar el hígado en un recipiente con él. Cuando hayan pasado dos horas, se puede proceder al tratamiento térmico de los despojos.
Usa bicarbonato de sodio
Antes de freír el hígado, puedes espolvorearlo con bicarbonato de sodio. Los despojos deben reposar durante una hora. Luego lave bien el producto con agua corriente y séquelo con toallas de papel.
Remojar el hígado en leche.
Treinta minutos antes del tratamiento térmico, conviene dejar los trozos de hígado en leche fría. Esta es una oportunidad para eliminar el sabor amargo del producto y hacerlo más suave. Luego seca los despojos con toallas de papel y empieza a freírlos.
No cortes el hígado en trozos demasiado grandes. De lo contrario, obtendrá un plato áspero, ya que los despojos no se calentarán a la temperatura deseada desde el interior.
Reglas para freír hígado.
Antes de añadir trozos de producto a la sartén, mojar cada uno de ellos en harina. El aceite de la sartén debe estar caliente, ya que el hígado se pegará rápidamente a la superficie del fondo frío. Cuando veas que ha aparecido una costra dorada en el producto, dale la vuelta a los trozos. En promedio, el hígado se fríe por un lado durante cinco minutos. No dejes el ingrediente en la sartén por mucho tiempo, ya que esto lo endurecerá y secará.
Si desea obtener un hígado perfectamente tierno y muy jugoso, agregue crema agria a la sartén. Cocine a fuego lento el contenido del recipiente durante no más de veinte minutos. Agregue a la sartén el ajo prensado o la cebolla cortada en aros para neutralizar el sabor amargo de los despojos.
Recuerda que es necesario salar el contenido del recipiente al final de la cocción. Gracias a esto, el hígado quedará muy jugoso y hará las delicias de todos los miembros de tu familia.
Asegúrese de agregar hígado a su dieta, ya que este ingrediente es increíblemente beneficioso para el cuerpo. ¡Lee todos los consejos descritos anteriormente que te ayudarán a conseguir un plato sabroso y jugoso sin dificultades innecesarias!