Se cree que una tortilla debe quedar esponjosa y abundante. Pero lo más importante: sabroso y apetitoso. ¿Quién no recuerda una tortilla esponjosa con un inquietante tinte azulado en el jardín de infancia?
Es poco probable que este plato abra el apetito. Hablemos de las adiciones más inusuales a este plato.
Verdes y queso
Esta es una opción clásica y no tiene nada de sorprendente. Se puede utilizar cualquier queso, hierbas frescas o congeladas. También puedes agregar requesón, pero será mejor cocinarlo con mantequilla.
Carne y cereales
La tortilla original se elabora con pollo y arroz. Esta ya es una cena completa. Es necesario hervir el arroz con antelación y freír la pechuga de pollo.
Verduras
Tanto el brócoli como el calabacín combinan bien con los huevos. En dicho desayuno habrá un mínimo de calorías. Las verduras se cortan en tiras finas o en cubos y se envían crudas a la sartén. Después de sofreír un poco, se vierten con la mezcla de huevo.
Pescado y vodka
Lo mejor es utilizar pescado rojo. Este desayuno gourmet se prepara los fines de semana. Se puede agregar pescado al gusto y vodka a razón de 1 cucharadita por cada 4 huevos.
Manzanas en caramelo
Esto ya es postre. Las manzanas se cortan en rodajas medianas, se fríen en mantequilla y, cuando las frutas se ablandan, se vierten con jugo de limón y se espolvorean con azúcar. Cuando las manzanas estén cubiertas de caramelo, llega el momento de la mezcla de huevo. Pero en este caso se baten las claras sin yemas y con azúcar (50 gramos de azúcar para 4 huevos). Luego las manzanas se rebozan en claras de huevo batidas y se fríen. El resultado es un soufflé de huevo con manzanas al horno.
