Quizás todos los chefs sepan cocinar la tradicional babka bielorrusa. Incluso los principiantes no son una excepción.
Al mismo tiempo, hay una pequeña adición a la receta habitual, gracias a la cual la babka quedará mucho más tierna y, en consecuencia, más sabrosa. Pero primero lo primero.
Para empezar, prepara todos los ingredientes necesarios. Necesitarás:
- 800 g de carne picada;
- 1 kg de patatas;
- 2-3 cucharadas de harina;
- 2 cebollas;
- 3 huevos;
- 300-400 g de tocino (se puede sustituir por pechuga ahumada);
- 400 ml de nata (un contenido de grasa del 10-20% es suficiente);
- sal y pimienta al gusto;
- aceite vegetal para freír.
Las patatas se deben pelar y lavar, y luego rallarlas en un rallador grueso (sí). Cuando la mezcla de patatas esté lista, espolvorea con harina para evitar que se oscurezca.
Después de eso, puedes pasar a la cebolla, que debes cortar en cubos pequeños. Lo mismo se debe hacer con el tocino (pechuga), que se debe freír hasta que esté crujiente y luego agregar la cebolla. Continúe friendo hasta que la verdura se aclare.
Mezcle patatas, huevos, tocino, cebolla, sal y pimienta, luego engrase una bandeja para horno con aceite y coloque la mitad de la masa resultante en una capa uniforme. La siguiente capa es carne picada y luego nuevamente patatas.
Rellena la futura babka con nata y colócala en el horno durante una hora a 180-200 grados. Para obtener una corteza dorada al final de la cocción, encienda el modo grill durante 5 a 10 minutos.