Incluso en casa, puedes preparar las patatas fritas perfectas, que serán incluso más sabrosas que las de muchos de tus restaurantes de comida rápida favoritos.
A continuación te contamos las reglas que se deben seguir para que las rodajas de patata queden crujientes por fuera y suaves por dentro.
Tenga la seguridad: las patatas preparadas de esta forma no se convertirán en trozos secos y no comestibles en media hora.
Para empezar, los tubérculos, por supuesto, deben pelarse y luego cortarse las partes redondeadas por todos lados para obtener un bloque rectangular.
Córtelo en rodajas de aproximadamente 0,6 x 0,6 cm de tamaño.
Ahora necesitas eliminar el exceso de almidón. Para ello, las piezas de trabajo se colocan en agua fría durante 30 minutos.
El siguiente paso es cocinar. Para 1 kg de patatas necesitarás 2 litros de agua, además de 1 cucharada de sal y 2 cucharadas de vinagre. Eche las futuras patatas fritas al agua cuando hierva y cocine durante 2-3 minutos más después de volver a hervir.
Después de esto, escurre el agua y coloca las rodajas sobre una toalla de papel para que se sequen.
Ya sólo queda sofreír las patatas. Esto debe hacerse en pequeñas porciones. No dejes una porción en aceite caliente por más de 1 minuto.