El rábano aparece en la dieta de muchas personas sólo una vez al año. Por lo tanto, con razón se la puede llamar verdura de temporada.
El cultivo de raíces rojizas aparece a la venta y en los parterres a finales de la primavera o principios del verano. Pero es recomendable utilizarlo con la mayor frecuencia posible.
Esta sencilla verdura tiene propiedades únicas y es muy beneficiosa para el hígado.
Beneficios de los rábanos
1. Los rábanos contienen vitamina C, antioxidantes y otras sustancias beneficiosas.
Comer rábanos ayuda al cuerpo a resistir los radicales libres, lo que protege al hígado del daño.
2. El siguiente punto importante es que los rábanos promueven la producción de bilis.
El consumo regular de verduras reduce la carga sobre el hígado y también ayuda a digerir las grasas.
3. La ciencia ha demostrado que las propiedades antiinflamatorias de los rábanos protegen contra el desarrollo de cirrosis e hígado graso.
4. Al mismo tiempo, los rábanos ayudan a eliminar toxinas y sustancias nocivas que ingresan al organismo con los alimentos.
Contraindicaciones
El consumo incontrolado de rábanos está contraindicado.
Y con una mayor acidez, comer verduras puede provocar irritación del estómago.