El movimiento es vida, y también prevención de enfermedades graves.
Este es un hecho médico real, no un truco. La mayoría de las enfermedades que se desarrollan con el paso de los años se pueden evitar simplemente caminando con más frecuencia.
Caminar ayuda a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol, lo que puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares como enfermedades coronarias y accidentes cerebrovasculares, dijo el doctor Alexander Myasnikov en el programa "Acerca de lo más importante".
Pero es necesario comprender correctamente las palabras del médico. Caminar no es una cura, sino un medio de prevención.
Si presta la atención necesaria al caminar, como mínimo puede reducir el riesgo de desarrollar obesidad, que en sí misma es peligrosa y conduce a la aparición de otras enfermedades.
Caminar también reduce el riesgo de exacerbación de enfermedades crónicas.
Caminar ayuda a combatir los efectos del estrés y mejora significativamente la calidad del sueño.
Pero definitivamente el mayor beneficio de caminar es el ejercicio saludable que le brinda al sistema cardiovascular.
Las caminatas diarias mejoran la circulación sanguínea y entrenan el corazón.
Si se trata de una caminata de bajo impacto, puede ayudar a mantener huesos y articulaciones sanos.
Sin embargo, antes de dejarse llevar por este tipo de prevención, el médico recomienda consultar con un especialista tratante que le ayudará a determinar el nivel e intensidad de la carga.
Anteriormente hablamos de las consecuencias de la falta crónica de sueño .
