En la vida cotidiana, la mayoría de personas suelen recurrir a recalentar los alimentos para ahorrar tiempo y facilitar la cocción.
Sin embargo, no todos los alimentos se pueden recalentar. Por lo tanto, vale la pena averiguar qué alimentos no se deben calentar y qué consecuencias negativas se pueden sentir.
Pollo
La carne de pollo es una de las fuentes más comunes de intoxicación alimentaria.
Recalentar el pollo puede promover el crecimiento de la bacteria salmonella. Por supuesto, si durante el calentamiento lograste alcanzar una temperatura de 75°C, entonces no habrá ningún problema.
Hongos
Los champiñones pueden echarse a perder rápidamente y recalentarlos puede provocar mal sabor y olores desagradables. Es mejor no cocinar nunca los champiñones con reserva.
Papa
Recalentar patatas puede crear una toxina que puede provocar intoxicación alimentaria.
Muchos también notan que el sabor de las patatas empeora después de recalentarlas.
Arroz
El arroz es un excelente lugar para que crezcan las bacterias, especialmente si no se almacena y recalienta adecuadamente.
Es mejor comer alimentos que contengan arroz inmediatamente después de cocinarlos y colocarlos en el refrigerador inmediatamente. Es por ello que muchos expertos no recomiendan comer pilaf, que se cocina en un gran caldero en varios establecimientos.
Espárragos
Los espárragos pierden nutrientes rápidamente cuando se recalientan, por lo que es mejor comerlos frescos.
Mariscos
Los mariscos como los camarones y el salmón pueden causar intoxicación alimentaria.
También vale la pena prestar atención a la forma en que se almacenan. Es mejor consumir los mariscos inmediatamente.
Especias y salsas
Las especias y salsas pueden perder su sabor cuando se recalientan, lo que hace que el plato sea menos apetecible. Es mejor agregarlos al plato solo antes de servir.
Anteriormente te contamos cómo cocinar correctamente el trigo sarraceno .