Entre las frutas de temporada (caquis, mandarinas y otras exóticas), los expertos destacan especialmente la granada.
Desde la antigüedad ha sido considerado un símbolo de juventud, así como de longevidad. También es interesante que la ciencia confirme estos datos.
Los expertos nos cuentan por qué es necesario incluir la granada en tu dieta.
En primer lugar, además de fibra, la granada contiene vitaminas B, C, K y PP.
También contiene potasio, magnesio, hierro, cobre y antioxidantes.
Con un uso regular, la granada fortalecerá el sistema inmunológico y protegerá el corazón y los vasos sanguíneos de enfermedades.
Además, la granada es beneficiosa para los niveles de hemoglobina y la circulación sanguínea.
En segundo lugar, los antioxidantes contenidos en la granada no sólo ralentizan el proceso de envejecimiento.
También minimizan el riesgo de desarrollar cáncer.
En tercer lugar, el jugo de granada es bueno para la digestión.
Reduce las reacciones inflamatorias, normaliza la presión arterial y es bueno para la función cerebral.
La granada está recomendada para adultos, niños y ancianos.
Pero puede causar daño en enfermedades del tracto gastrointestinal (gastritis, úlceras estomacales o intestinales, pancreatitis, enteritis), hemorroides, estreñimiento, problemas con el esmalte dental, así como alergias e intolerancias individuales.
La granada puede causar daño si se abusa de ella y no se sigue la norma.