En enero, muchos recién comienzan a alejarse de las vacaciones de invierno, que a menudo se asocian con una gran cantidad de comida chatarra.
Por ello, el resto del mes conviene dedicarlo a llevar una dieta lo más saludable posible.
Cualquier tipo de cebolla (puerro, chalota, cebollino y otros), así como el ajo, nos permiten protegernos de los resfriados, tonificarnos y fortalecer el sistema inmunológico.
Estos productos también ayudarán a acelerar su metabolismo lento.
Los expertos dicen que las verduras de hojas ligeras con una composición rica y equilibrada son la mejor opción después de las comidas pesadas de la fiesta de Año Nuevo.
Las espinacas son especialmente beneficiosas para quienes quieren protegerse contra las deficiencias de vitaminas y nutrientes.
Este tipo de repollo siempre es relevante porque su composición es lo más impecable posible. Con brócoli podrás preparar guarniciones ligeras y nutritivas que te ayudarán a adelgazar y normalizar tu salud.
Durante la estación fría, los cítricos son uno de los elementos nutricionales más importantes. Es una fuente de calidad de antioxidantes.
Así que sigue comiendo cítricos hasta que llegue el verano.
Este maravilloso producto de temporada es la clave para la buena salud, la buena condición física y la longevidad. Las granadas se deben consumir 2-3 veces por semana.
Anteriormente hablamos de si es posible comer frutos secos mientras se adelgaza .