¿Se ha encontrado alguna vez con una situación en la que el pescado pierde su aspecto apetitoso durante el proceso de fritura?
Según la cocinera Yulia Arkhipova, experta de la publicación online BelNovosti, esto sucede con bastante frecuencia: los trozos (o el pescado entero) se pegan firmemente al fondo de la sartén.
Y la cantidad de aceite no tiene nada que ver: aunque la canal del pescado esté casi bañada en grasa, esto no la salva.
Este problema surge especialmente cuando se trata de pescado congelado.
La única forma de darle la vuelta con cuidado a un pez así es con la ayuda de una varita mágica. Está claro que la cocina promedio no tiene esa “herramienta”, por lo que resulta que en lugar de un apetitoso pescado frito, terminas con un desastre colapsado en el plato.
Tal destino no es terrible solo para aquellos que conocen un truco especial para freír pescado.
Resulta que los trozos de pescado no se deshacen durante la fritura y, en consecuencia, no se pegarán a la sartén si primero se sumergen en salmuera.
Es fácil de preparar: para 1 litro de agua sólo necesitas 1 cucharadita de sal (puedes añadir una pizca de azúcar si lo deseas). Coloca el pescado en la solución durante 5 minutos, luego sécalo y fríelo como de costumbre.