Un paso antes de freír y el sabor del pescado quedará irreconocible.
El capelán se considera un pescado económico que no difiere en valor nutricional ni sabor especial.
Sin embargo, muchos ni siquiera saben que se sirve en los restaurantes. Los cocineros lo hacen tan jugoso que nadie recuerda el capelán "seco y aburrido".
El pescado se marina en una solución especial. Le aporta un sabor ligero y ligeramente dulce.
Primero hay que preparar el pescado (150 g): lavarlo, triparlo, etc. Luego proceder a preparar el adobo.
Mezcle 1,5 tazas de agua, 1,5 cucharadas. l. azúcar y 2 cucharadas. l. sal. Los componentes deben estar completamente disueltos.
Vierta la solución resultante sobre el capelán durante 10 minutos. Luego, el pescado debe secarse bien con servilletas de papel, enrollarse en 100 g de harina y freírse en aceite caliente (2 cucharadas), aproximadamente 4 minutos cada uno. a cada lado.
Una simple marinada hace que el pescado sea más jugoso y le da un sabor inusual. Este capelán se complementa con limón.