Las chuletas tiernas y aireadas son un plato excelente para el almuerzo o la cena. Son fáciles y rápidos de preparar y combinan bien con una variedad de guarniciones.
Pero para que la golosina resulte realmente apetitosa, es necesario recordar las proporciones de los ingredientes al preparar el plato de carne.
Muchos principiantes en la cocina cometen un error.
A menudo añaden demasiado o muy poco pan.
No creas que este producto abarata las chuletas. De hecho, el pan rallado, previamente remojado en agua, es necesario para darle al plato esponjosidad y suavidad.
Para 500 gramos de carne picada, conviene tomar unos 170-180 gramos de pan blanco sin corteza.
Son unas seis piezas clásicas. Deben llenarse con 150 ml de agua fría. Luego, cuando el pan se hinche, es necesario escurrir el agua y agregar la miga a la carne picada.
Para esta proporción también debes tomar 200 gramos de cebolla, una cucharadita de sal y un poco de pimienta. No es necesario añadir el huevo; endurecerá el producto.