Hervir un huevo es una tarea muy sencilla que incluso un niño puede realizar. Aún así, el proceso de cocción no lleva mucho tiempo y no requiere conocimientos culinarios serios.
Pero, ¿cómo preparar el producto de tal forma que sea fácil de limpiar y tenga mejor sabor?
Un truco culinario puede sorprenderte.
Los expertos recomiendan agitar los huevos antes de colocarlos en una cacerola con agua hirviendo.
Esta sencilla manipulación distribuye uniformemente el producto dentro de la cáscara, lo que hace que el sabor del huevo cocido sea más delicado y agradable.
Además, será mucho más fácil retirar la cáscara posteriormente.
Pero si existe el temor de que la integridad de la yema se vea afectada durante dicho procedimiento, se puede realizar otro.
Para ello, coloca el huevo sobre una superficie plana y dura y gíralo varias veces. Después de eso, el producto se puede enviar a la sartén.