La comida rápida nunca ha sido buena para nadie. No se trata sólo de una figura mimada o de comer algo mientras viaja.
Este tipo de alimentos es el camino más corto hacia las enfermedades crónicas que comienzan con kilos de más. Y los problemas pueden ser muy diferentes: desde obesidad hasta diabetes y enfermedades hepáticas.
Pero, ¿qué hacer cuando no puedes, pero realmente quieres comer algo de esta categoría?
Probablemente, una vez cada dos semanas puedas permitirte comer algo poco saludable, siempre que se ajuste a tu ingesta calórica diaria. La comida rápida y otros tipos de comida chatarra son muy ricos en calorías, por lo que no es necesario comerlos con más frecuencia”, dijo en una entrevista con la radio Sputnik la endocrinóloga y nutricionista Ekaterina Kazachkova.
Pero hay que saber que las enfermedades enumeradas no son una lista exhaustiva.
La comida rápida es rica en calorías. Por ello, el especialista aconseja tener una cierta idea de la cantidad de calorías quemadas y consumidas con dichos alimentos.
Lo mejor es prestar atención a las verduras y frutas.
Contienen una gran cantidad de fibra, que puede absorber parcialmente las grasas trans consumidas.
Si una persona sigue una dieta saludable y visita ocasionalmente una hamburguesería, la microflora intestinal debería hacer frente a los alimentos poco saludables.
Pero todas estas reglas y excepciones sólo pueden aplicarse a un cuerpo joven.
A medida que envejecemos, debemos prestar aún más atención a nuestra dieta.
Anteriormente te contamos qué alimentos debes comer para combatir el colesterol alto .