Los huevos de gallina y el café son uno de los tipos de desayuno más populares en todos los continentes.
Cualquier persona para quien el desayuno no es sólo una palabra, sino una carga de energía y vigor durante la primera mitad del día, come así dos o tres veces por semana.
Pero los nutricionistas británicos criticaron este enfoque y compartieron sus hallazgos con el Mirror.
huevos y cafe
Los huevos de gallina son fuente de proteínas, vitaminas A, D, B 12 y otras sustancias beneficiosas. El café es una fuente bien conocida de cafeína.
Pero juntos, estos productos interfieren con la absorción de nutrientes.
Debido a los taninos y polifenoles contenidos en el café, se altera la absorción de hierro y calcio de los huevos.
Además, el desayuno puede provocar problemas digestivos, provocar acidez de estómago e incluso provocar deshidratación.
También es importante recordar que el café afecta la absorción de antibióticos o antiácidos.
Y al comer huevos, este efecto se potencia, por lo que disminuye la eficacia de los medicamentos.
Por lo tanto, en combinación con huevos para el desayuno, lo mejor es preparar té. O tomar café una hora después de comer huevos.