Imagínate que te vas a la cama y tu cuerpo continúa perdiendo peso.
¿Suena a ciencia ficción? De hecho, esta es la realidad si sabes qué alimentos desencadenan la quema de grasa nocturna.
El secreto es activar tu metabolismo sin sobrecargar tu estómago.

Por ejemplo, el yogur griego sin azúcar es una opción ideal. Contiene caseína, una proteína que tarda entre 6 y 8 horas en digerirse.
Mientras duermes, tus músculos reciben aminoácidos y tu cuerpo, en lugar de tomar energía de tus músculos, descompone la grasa. Añade una pizca de canela a tu yogur para reducir tus niveles de azúcar en sangre y prevenir picos de insulina nocturnos.
Las almendras son otro ayudante nocturno. Sólo unos pocos frutos secos te aportarán magnesio, que relaja el sistema nervioso y mejora la calidad del sueño.
Y cuanto más profundo es el sueño, más activamente se produce la hormona del crecimiento, responsable de la restauración de los tejidos y la quema de grasa.
Pero cuidado: las almendras tienen muchas calorías. Comer en exceso tendrá el efecto contrario: pesadez en el estómago e hinchazón por la mañana.
Cherry es el caballo oscuro en esta lista. Contiene melatonina, que no sólo ayuda a conciliar el sueño, sino que también regula los ritmos circadianos.
Cuando el cuerpo funciona “como un reloj”, el metabolismo se acelera entre un 20 y un 30%. Las cerezas ácidas también reducen los niveles de ácido úrico, que causa inflamación e interfiere con la pérdida de peso.
¿Pero qué pasa con las prohibiciones? Evite cualquier cosa que contenga azúcar oculta: incluso las barras de dátiles “saludables” aumentarán la insulina y detendrán la quema de grasa.
El alcohol es el principal enemigo: altera la fase de sueño profundo en la que se produce la recuperación.
Pero una taza de té de manzanilla con una gota de miel es una excelente opción. La manzanilla reduce la ansiedad y la miel contiene fructosa, que se absorbe lentamente y no provoca picos de azúcar.
Experimento: intente comer una porción de requesón con semillas de lino una hora antes de acostarse durante una semana. El requesón aportará proteínas y las semillas aportarán omega-3, que acelera el metabolismo.
Por la mañana, notarás que te despiertas antes de que suene la alarma y te sientes con energía. Esta es una señal de que el cuerpo ha cambiado al modo de quema eficiente de calorías.
Recuerde: la pérdida de peso nocturna solo funciona en combinación. Si comes en exceso durante el día, los refrigerios nocturnos no te ayudarán. Pero como herramienta para acelerar resultados, es un verdadero hallazgo. Pruébalo y en un mes la báscula mostrará aquello que tanto has soñado.