Muchas personas golosas no quieren ponerse a dieta porque no están dispuestas a excluir el chocolate de su dieta.
Por alguna razón, están seguros de que el producto de confitería mencionado anteriormente es uno de los productos que conviene abandonar durante el período de adelgazamiento.
De hecho, el chocolate se puede consumir incluso estando a dieta.
Si se siguen ciertas reglas, el producto no interferirá con la pérdida de peso.
Por el contrario, una golosina ayudará a la persona a mantener la sensación de saciedad y buen humor, a pesar de la ingesta reducida de calorías. Esto significa que lo más probable es que se evite una "avería".
El chocolate también es fuente de antioxidantes, vitaminas, hierro, magnesio, además de otras sustancias y elementos beneficiosos. El producto mejora la función cerebral y tiene un efecto positivo sobre el sistema cardiovascular.
Pero, ¿qué reglas exactamente debe seguir una persona que está perdiendo peso para que el chocolate deje de ser su “enemigo”? Sólo hay dos recomendaciones de este tipo.
Elige un tipo específico de chocolate.
Durante la dieta es recomendable consumir chocolate con alto contenido en semillas de cacao y bajo contenido en azúcar.
El chocolate negro es una gran elección. Pero deberías dejar los lácteos por un tiempo.
“Todo está bien con moderación”
Incluso el chocolate con bajo contenido de azúcar tiene un alto contenido calórico.
Por tanto, no consuma este producto con demasiada frecuencia ni en grandes cantidades. Lleve un registro de la ingesta total de calorías y la proporción de BZHU. No vayas más allá de la norma.
Sin embargo, seguir esta regla será bastante sencillo. El chocolate amargo te llena rápidamente. Lo más probable es que no puedas comer demasiado de este producto.