El deseo de comer harina puede explicarse por el hecho de que estos productos son una fuente de energía rápida.
Muy a menudo, la dependencia de dichos alimentos aparece si se altera el intercambio de energía o si hay un desequilibrio de nutrientes en el cuerpo. Como resultado, el cuerpo intenta compensar la deficiencia de esta manera.
La causa también puede ser la resistencia a la insulina. Otra razón es una violación de la síntesis de leptina.
Pero, ¿es posible en este caso sustituir los productos de harina nocivos por alimentos saludables?
La respuesta a esta pregunta es sí.
La dietista-nutricionista Irina Mansurova habló sobre esto con más detalle en una conversación con representantes de la publicación aif.ru.
Para deshacerse del deseo de comer productos de harina, debe recordar llevar una dieta equilibrada para obtener proteínas, grasas y carbohidratos en cantidades normales.
Además, los alimentos ricos en calorías conviene sustituirlos por alimentos proteicos, así como manzanas, espinacas, remolachas, brócoli, aguacate o zanahorias.
Pero al mismo tiempo, no debe prohibirse de inmediato y por completo comer harina, ya que esto puede provocar averías. Es importante acostumbrarse gradualmente al nuevo sistema de nutrición.
Además, no sería superfluo hacerse pruebas, someterse a un examen y consultar con los médicos si existe un antojo constante de productos de harina.