Los expertos estadounidenses han llegado a la conclusión de que los hombres y mujeres que han seguido previamente el ayuno intermitente tienen mayor riesgo de comer en exceso.
La revista científica Appetite escribe sobre esto.
Los médicos realizaron un experimento con la participación de voluntarios.
Algunos de ellos ya se habían adherido al principio del ayuno intermitente.
El estudio encontró que los hombres y mujeres que estaban involucrados con el ayuno intermitente tenían muchas más probabilidades de experimentar síntomas de trastornos alimentarios.
Como explicaron los científicos, el ayuno intermitente se asocia negativamente con la alimentación intuitiva.
Esto significa que una persona no escucha a su cuerpo, sino que trata de comer según un horario y no cuando tiene mucha hambre.
Además, dicha dieta se basa en restricciones que no permiten que el cuerpo proporcione la cantidad necesaria de nutrientes.
Como resultado, sólo aparecen más problemas con la conducta alimentaria.
