Las zanahorias crujientes son siempre una gran adición a tu dieta.
Se puede guisar, hervir o incluso servir crudo.
Pero si las frutas en el refrigerador ya han comenzado a marchitarse y no lo deleitan con un crujido apetitoso, entonces debe tomar medidas para restaurar la frescura del producto.
Esto se puede hacer de forma sencilla y rápida.
Basta con poner unas cuantas frutas en un vaso de agua fría. Es mejor dejar los tubérculos en este estado en el estante del refrigerador.
Al cabo de unas horas el efecto será notable.
Además, este método es adecuado cuando es necesario "reanimar" otras verduras saludables, por ejemplo, la coliflor.
El método también se puede utilizar para el apio. En este caso, es importante cortar primero el centímetro inferior del tallo.
Incluso la lechuga marchita lucirá como nueva. Para un efecto más brillante, añade unos cubitos de hielo al vaso.
Anteriormente te contamos cómo devolverle la frescura a los panqueques de ayer.