Ideal se considera pilaf, que se distingue por su color dorado y su sabor muy brillante.
Pero a veces el plato resulta de color amarillo pálido (o incluso blanco) y no el más apetecible.
¿Qué explica la falta de un color bonito y un aroma agradable en los alimentos?
Curiosamente, no es falta de especias.
Lo más probable es que el problema se deba a... un tratamiento previo inadecuado de las zanahorias y las cebollas.
La cocinera y panadera de cuarta categoría Yulia Arkhipova, experta en el campo culinario de la publicación de la red Belnovosti, destacó: los ingredientes vegetales deben freírse adecuadamente.
Cómo preparar verduras para pilaf.
Los componentes del plato de cebolla y zanahoria se deben freír hasta que estén dorados.
Al mismo tiempo, no debes permitir que las verduras se quemen.
Si el tratamiento térmico de zanahorias y cebollas se realiza correctamente, el pilaf quedará perfecto.
Gracias a los ingredientes vegetales bien fritos, el plato adquirirá un bonito color dorado y quedará muy sabroso.
Pero no vale la pena intentar convertir el pilaf blanco en un amarillo brillante simplemente agregando una gran cantidad de cúrcuma y azafrán.
Estas especias deben usarse para realzar el color dorado ya existente del pilaf.