Seguramente muchos habrán notado que el sabor de las chuletas difiere notablemente según quién las cocine.
Sin embargo, existen ciertas reglas que ayudarán a mejorar la calidad del plato, independientemente de la receta elegida.
La chef Yulia Arkhipova, experta en temas culinarios de la publicación de la red BelNovosti, habla sobre los secretos que ayudarán a que las chuletas sean lo más sabrosas posible.
¿Qué sutilezas simples deberías recordar?
Introduce la cebolla correctamente.
No debes picar la cebolla en trozos grandes y enviarla a la carne picada de esta forma: las chuletas no se volverán más jugosas y desarrollarán un sabor específico.
Es mejor picar la cebolla más pequeña y sofreírla. Las chuletas quedarán mucho más sabrosas.
No uses huevos
No te preocupes que las chuletas se deshagan: en la mayoría de los casos esto no sucede. Solo necesitas amasar bien las chuletas.
Sin duda, puedes añadir un poco de almidón o sémola.
Pero los huevos pueden endurecer las chuletas.
No hagas chuletas grandes
Un plato así simplemente no se horneará o se desmoronará al darle la vuelta. Por lo tanto, concéntrese en el tamaño de chuleta estándar.