El secado es una excelente manera de almacenar eneldo, pero, desafortunadamente, no es 100% posible conservar el sabor fresco de las hierbas, su aroma y color.
Pero la congelación es bastante capaz de hacer frente a la tarea. Es cierto que no es necesario actuar exactamente como de costumbre.
En primer lugar, el eneldo no se debe lavar. Incluso si secas las ramas, seguirán absorbiendo agua, por lo que el eneldo se "congela" rápidamente y ya no huele tan fuerte.
Por lo tanto, si ha recolectado eneldo de su propio jardín, considere abandonar este procedimiento.
En segundo lugar, no utilice bolsas grandes para congelar.
El caso es que cuando se sacan estos preparados del congelador para “pellizcar” un trozo, todo el “bloque” de verduras finamente picadas se cubre de escarcha y hielo.
En su lugar, utilice bolsas pequeñas para guardar el eneldo en el congelador.
El eneldo congelado de esta forma (sin lavar, finamente picado y envasado en bolsas pequeñas) se puede incluso añadir a una ensalada: es prácticamente indistinguible del fresco.
