Un punto importante en el proceso de elaboración del borscht es que es importante darle al plato un tono rubí, que quedará al guardar la sopa y volver a hervirla.
Las amas de casa utilizan principalmente "fijadores de color" naturales: jugo de limón, vinagre de manzana o de mesa, pasta de tomate y chucrut.
Sin embargo, no todo el mundo sabe que no funcionarán si las remolachas no estaban inicialmente lo suficientemente rojas. Por tanto, es extremadamente importante seleccionar el componente más adecuado.
Cómo elegir las remolachas adecuadas para el borscht.
En primer lugar, en una tienda o mercado debes prestar atención a los tubérculos pequeños. Como regla general, le dan al borscht el tono más brillante.
Las remolachas pequeñas siempre serán más rojas y sabrosas. Si le confunde el tamaño del tubérculo, siempre puede simplemente aumentar la cantidad. También vale la pena agregar un poco de azúcar durante el tratamiento térmico para asegurar que se conserve el tono rubí.
Pero es mejor dejar los tubérculos grandes para preparar ensaladas tradicionales.