Cortar tomates para ensaladas u otros platos no es una broma. Mucho depende no sólo del cuchillo afilado, sino también de los propios tomates.
Algunas personas creen que también es necesario pelar las verduras, especialmente si la cáscara está firme y densa. Te diremos lo que realmente debes considerar.
Elegir tomates
En invierno la elección no es muy amplia. Incluso si hay diferentes variedades de tomates en el mostrador, la mayoría tendrá el mismo sabor: pálido e inexpresivo.
El resto del año hay mucho en qué pensar.
Si prefiere pelar verduras, debe elegir no solo frutas maduras, sino también frutas densas y de color rojo, no rosado.
Estos últimos son ideales para los amantes de la cocina casera, donde todo es rápido, sencillo y no menos sabroso. Los tomates rosados son más blandos y no es tan fácil separar la pulpa de la piel.
Rebanada
Para pelar tomates para ensalada, es necesario hacer un corte en forma de cruz, sumergir las verduras en agua hirviendo durante 30 segundos y luego en agua con hielo. Después de esto, los tomates son fáciles de pelar y el sabor permanece casi sin cambios.
Para evitar que los tomates pelados se esparzan en la ensalada, no se deben cortar en cuartos. Entonces, por cierto, es más conveniente quitar la cola del tallo y el sabor no cambia en absoluto.