En la sociedad generalmente se acepta que una persona que habla sola no es del todo adecuada.
Se trata de un verdadero error, a menos, claro está, que se trate de casos excepcionales. De lo contrario, esta es una actividad completamente comprensible e incluso útil.
La investigación sobre este tema fue realizada por empleados de la Clínica Cleveland, EE. UU.
Cada persona habla consigo misma. Pero algunos lo hacen mentalmente, es decir, para sí mismos, otros hacen preguntas y las responden ellos mismos en voz alta.
Ni el primero ni el segundo son signo de deterioro cognitivo.
Por ejemplo, en una situación estresante, no todo el mundo puede resistirse a hablar o maldecir.
Además de aliviar el estrés, hablar contigo mismo (en voz alta) también es útil porque te ayuda a encontrar una solución a un problema difícil.
Además de los monólogos y razonamientos, los deportistas a veces hablan solos y a veces necesitan aumentar su motivación.
Pero si te preocupa que tu hábito asuste a los demás, entonces, en lugar de decir las palabras en voz alta o guardarlas en tu cabeza, escríbelas en un papel.
Pero en algunos casos, el hábito de hablar solo es signo de un trastorno mental.
Un hábito deja de ser saludable si una persona no comprende que está hablando sola, escucha voces separadas en su cabeza y reacciona a ellas.