Si los perros comen alegremente lo que cae de la mesa de su dueño, esto no significa que sea bueno para ellos.
Abusando de tal generosidad, los propios dueños de mascotas acercan la visita al veterinario y aumentan la frecuencia de las visitas al hospital veterinario.
Esto es lo que dicen los expertos al respecto.
Aunque la primera opción es una dieta completa para un perro, muchos todavía prefieren preparar ellos mismos la comida para su mascota.
Los defensores de la alimentación natural deberían recordar esta lista de productos que a primera vista parecen inofensivos.
1. Los perros no deben comer carne cruda en general y cerdo y cordero en particular.
2. Además, están prohibidas todas las delicias cárnicas del menú humano, como chuletas, albóndigas y salchichas.
3. Los perros pueden comer cereales, pero no todos. Si el trigo sarraceno y el arroz deberían estar en el menú de un perro, entonces la avena y la cebada, por el contrario, no deberían estar.
4. Verduras: pueden ser pepinos, calabacines, pimientos morrones y zanahorias. Se permiten tomates, pero en pequeñas cantidades. Las remolachas y las patatas están contraindicadas y no se permiten en absoluto la acedera y el ruibarbo.
5. Se permiten frutas y bayas, pero no cítricos ni uvas. También están prohibidos el caqui, la sandía y el melón.
6. También está prohibida la leche, a menos que se trate de productos lácteos fermentados con bajo contenido de grasa.
7. Los huevos son posibles, pero es mejor dar la clara cocida y la yema cruda.
1. Sal, salsas y especias.
2. Pan blanco.
3. Azúcar y chocolate.
4. Legumbres y setas.