Probablemente, todos los fabricantes, en aras de obtener ganancias, lo elogian de todas las formas posibles al anunciar su producto.
Como resultado, los consumidores comunes y corrientes compran productos pensando que están cuidando de sí mismos y de sus familias. De hecho, detrás de los eslóganes publicitarios y los bonitos envases se esconde comida pseudosaludable.
Los zumos naturales se han convertido desde hace mucho tiempo en sinónimo de un estilo de vida saludable, probablemente debido al estereotipo generalmente aceptado de que la mejor forma de empezar el día es con un zumo recién exprimido.
De hecho, estas bebidas contienen aproximadamente la misma cantidad de azúcar que los refrescos. Entonces, 300-320 g de jugo de manzana contienen aproximadamente 36 g de azúcar sin refinar.
Un exceso de azúcar conlleva un aumento de los niveles de glucosa en sangre, liberación de insulina, comer en exceso y, en consecuencia, exceso de peso.
En los paquetes con estos panes a menudo se puede ver la inscripción: un producto magro para una figura esbelta.
Sin embargo, a la hora de elegir un producto, siempre debes prestar atención a su composición. Por ejemplo, las galletas de arroz tienen un IG muy alto: 1,5 veces más que el azúcar. Si los consumes sin moderación, puede producirse adicción a la comida, obesidad y otras enfermedades.
Incluso si ve trozos de fruta y nueces en los cereales y muesli ya preparados, esto no significa que no contengan azúcar. Además, estos desayunos rápidos suelen contener aceite refinado nocivo, que es una fuente de grasas trans peligrosas.