Algunos aromas estimulan el apetito, mientras que otros, por el contrario, lo reducen.
A esta conclusión llegó el aromaterapeuta Alan Hirsch, por lo que surgió la dieta aromática.
Para adelgazar, un aromaterapeuta recomienda inhalar aceites esenciales antes de las comidas: menta, lavanda o rosa. También puedes oler manzanas y plátanos.
También debes aspirar aire por la nariz cuando empieces a sentir hambre.
Puedes comer cualquier cosa siguiendo una dieta aromática, pero sólo si tienes hambre y después de oler el aroma recomendado.
Para el desayuno conviene inhalar el aroma de la menta y, si tienes apetito, comer tostadas con queso.
El segundo desayuno consiste en yogur con frutos rojos, que se puede consumir después de inhalar el aroma.
De la misma forma, después de inhalar el aroma, puedes iniciar un almuerzo a base de carne y verduras.
Para la merienda, vuelva a utilizar el aceite perfumado y disfrute de la fruta.
Cena: inhala nuevamente los aromas de menta, rosa, lavanda, manzana o plátano y come pescado con verduras.