Muchas personas que lograron perder una cantidad impresionante de kilogramos en poco tiempo, para su disgusto, notan que la calidad de su piel deja mucho que desear.
Desafortunadamente, la flacidez de la piel del abdomen y otras zonas, que se produce como resultado de una rápida pérdida de peso, es en la mayoría de los casos un proceso irreversible.
Sólo hay una respuesta: trate de mantener el proceso de pérdida de peso lento y gradual.
El ritmo de pérdida de peso puede variar y depende de muchos factores. Varios estudios científicos indican que 3-4 kilogramos por mes se considera una tasa segura de pérdida de peso.
Perder peso más rápido puede provocar diversos problemas de salud, incluida la flacidez de la piel y un metabolismo más lento.
Esto sucede porque el cuerpo entra en modo de ahorro de energía cuando ve que se agotan sus recursos.
Es importante comprender que el objetivo final no es la pérdida de peso en sí, sino la capacidad de mantener un peso estable en el futuro. La pérdida de peso gradual ayuda a mantener la salud y evitar posibles riesgos asociados a una pérdida de peso rápida.
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