Al elegir una dieta, debe consultar a un médico y seleccionar el menú individualmente.
Si ignora esta sencilla regla, puede perjudicar gravemente su salud.
El caso es que las dietas populares no son aptas para todo el mundo. Al elegir una dieta, debe tener en cuenta la constitución de su cuerpo, el metabolismo, el estado de salud, etc.
La gastroenteróloga Alla Nerullina le contó a Life más sobre esto.
Señaló que duda de la eficacia del conteo de calorías y señaló que los esquemas para este cálculo varían.
Los fabricantes pueden indicar el contenido calórico de un producto en las etiquetas, pero el error puede alcanzar hasta el 20 por ciento.
Además, las condiciones de cocción afectan el contenido calórico. Por ejemplo, si un huevo crudo contiene 47 kcal, una tortilla contiene unas 100.
En cuanto a la popular dieta baja en carbohidratos, tiene muchos efectos secundarios, por ejemplo, existe la posibilidad de problemas con la glándula tiroides y los niveles hormonales. La dieta ceto (sin carbohidratos) es dañina, ya que puede provocar calambres, hipoglucemia, etc.
El consumo de alcohol y una monodieta pueden tener consecuencias negativas.