Es difícil encontrar un gourmet que rechace el pescado frito: sabroso, dorado y con una corteza apetitosa.
Al mismo tiempo, no todas las personas saben cómo preparar adecuadamente un producto para el tratamiento térmico.
Resulta que antes de freír, los trozos de pescado no solo se deben salar, sino también espolvorear con azúcar granulada.
Yulia Arkhipova, cocinera y panadera de cuarta categoría, experta en el campo culinario de la publicación "Red Belnovosti", explicó el significado de este procedimiento culinario.
Gracias al producto a granel, el pescado adquiere una corteza fragante durante la fritura. La superficie del plato se vuelve dorada.
La corteza resultante tendrá un agradable crujido y un sabor brillante.
El caso es que una “nota” dulce apenas perceptible sólo mejora el plato: el sabor adquiere “volumen”.
Lo principal es no exagerar con el azúcar granulada. Una pizca es suficiente para cinco trozos de pescado.
Hay una recomendación interesante sobre la sal: es recomendable añadirla a la harina. Este enfoque también aumenta las posibilidades de obtener un plato con una corteza dorada. Además, la comida seguramente quedará jugosa.
Los errores que provocan que las chuletas se deshagan durante la fritura se enumeraron anteriormente.