Mucha gente conoce los diversos secretos del borscht rojo, que tienen distintos grados de eficacia.
Nadie quiere terminar con una sopa de color naranja, ya que esto indicará que hubo imprecisiones en el proceso de cocción.
Por eso, algunos secretos siempre te ayudarán a presentar el borscht en el color "correcto".
Mucha gente olvida que son las zanahorias las culpables de que el borscht se vuelva naranja. Por eso, en ocasiones incluso se fríe por separado.
Algunas personas simplemente fríen las zanahorias en aceite vegetal y añaden un trozo de producto cremoso durante el proceso. Otros usan manteca de cerdo para darle más sabor y atenuar el color. En este caso, el borscht resulta no sólo espectacular, sino también sabroso.
El punto más importante es utilizar ingredientes adicionales para asegurar el color de las remolachas. Gracias a esto, la sopa permanecerá roja.
Cualquier ingrediente ácido servirá. Los ingredientes más utilizados son la pasta de tomate, los arándanos rojos, el jugo de limón y el vinagre.
Gracias al producto dulce, el borscht quedará rojo, rico y sabroso. Basta añadir media cucharada pequeña de azúcar para conseguir el efecto deseado.
Esto también ayudará a “equilibrar” el ácido.