La remolacha hervida es un ingrediente imprescindible en muchos platos. En primer lugar las ensaladas.
Este componente hace que la comida sea más apetecible y le da un aspecto interesante.
Pero hay un problema: el tubérculo tarda mucho en cocinarse. El procedimiento puede durar más de dos horas.
Sin embargo, hay un pequeño truco que acelera notablemente la preparación de la verdura.
El cocinero ahorrará tiempo utilizando... agua fría.
A primera vista esto suena extraño. Al parecer, ¿cómo se pueden “cocer” las remolachas con agua a baja temperatura?
De hecho, el método realmente funciona. Y el punto es la diferencia de temperatura, gracias a la cual el cultivo de raíces está listo más rápido.
Primero, la verdura debe estar en agua hirviendo durante media hora. O mejor aún, 35 minutos. Después de esto, las remolachas deben exponerse a un líquido muy frío.
Hay dos maneras. La primera es la siguiente: los tubérculos parcialmente cocidos deben mantenerse bajo el chorro de agua a baja temperatura.
Segunda opción: se debe colocar la verdura en un recipiente lleno de líquido y hielo. Pero el problema es que habrá que cambiar el agua 2-3 veces, ya que se calentará.
La duración del procesamiento en frío de la remolacha debe ser de un cuarto de hora. Como resultado, la verdura quedará completamente cocida.
Por lo tanto, la cocción tardará entre 45 y 50 minutos en lugar de 2,5 horas.