Debido a las características específicas de la carne de pollo, las chuletas pueden quedar algo secas, lo que definitivamente arruinará la impresión del plato.
Por lo tanto, hay que tener cuidado de darle al plato el nivel adecuado de jugosidad.
Puedes lograr este resultado usando una receta especial.
- un par de trozos de filete de pollo;
- un paquete de requesón (no más de 200 gramos);
- cebolla y un huevo;
- tres cucharadas de galletas saladas;
- ingredientes a su discreción (hierbas frescas, sal, especias).
Como utilizamos requesón como parte de la receta, no hay necesidad de pan. El filete de pollo se debe lavar, secar y picar con una picadora de carne.
Puedes hacer lo mismo con las cebollas. La verdura se puede simplemente picar finamente y freír previamente para darle más sabor.
Combine la carne picada preparada con los ingredientes restantes y mezcle hasta que quede suave. Para darle a las chuletas un sabor y aroma más brillantes, puedes agregar un par de dientes de ajo.
Ya solo queda formar las chuletas y utilizar el empanizado.