Cualquier cocinero experimentado le dirá que freír bien preparado es la clave del éxito de un borscht de alta calidad.
Sin embargo, muchas personas cometen graves errores en el proceso de preparación.
Como resultado, la sopa puede adquirir un color pálido o perder su rico sabor.
Aunque existen recetas que implican freír remolachas, zanahorias y cebollas juntas, esto no se debe hacer.
Debido a esto, se pierde el sabor de cada componente.
Además, es poco probable que el borscht tenga un color intenso.
Para que el borscht resulte increíblemente sabroso, es más prudente abandonar el asado tradicional de verduras y cocinarlo a fuego lento. La sopa quedará más rica, aromática y rica.
En este caso, lo mejor es cocinar las verduras tapadas a fuego lento.
A veces se puede oír hablar de qué alimentos mejoran el sabor del borscht. En la mayoría de los casos, estas recomendaciones mencionan el azúcar, los tomates blanqueados sin piel, el azúcar y la pasta de tomate.
Es importante recordar que no se añaden a la sopa, sino directamente a la fritura. En este caso, el borscht quedará mucho más sabroso.