A muchas personas les gustan los frijoles como guarnición o como ingrediente para ensaladas o sopas.
Pero el proceso de preparación y cocción puede parecer demasiado largo y complicado para muchos.
Por lo tanto, algunas amas de casa eligen un producto enlatado, con el que es mucho más fácil trabajar. Pero el sabor y los beneficios de un producto enlatado no se pueden comparar con los frijoles hervidos.
Sin embargo, existe una técnica muy sencilla que te ayudará a cocinar frijoles blandos sin remojarlos.
Será necesario colocar la legumbre en un cazo con líquido y esperar hasta que hierva. A continuación, vierte 100 ml de agua fría y espera hasta que vuelva a hervir.
Debes repetir este truco tres veces. Como resultado, agregarás otros 300 ml de agua.
La tercera vez que note el procedimiento de ebullición, deberá realizar un paso más simple. Las amas de casa experimentadas recomiendan agregar dos cucharadas de aceite en esta etapa.
Después de esto deberás esperar de 30 a 40 minutos. Este tiempo será suficiente para que los frijoles se ablanden.