Si se prepara correctamente, el hígado puede convertirse en su plato estrella que sorprenderá a sus invitados y familiares.
Con el enfoque correcto, los despojos siempre resultan tiernos, sabrosos y suaves.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, las amas de casa se enfrentan a diversas dificultades. El hecho es que el hígado suele ser amargo, no masticable y, en general, no parece muy atractivo.
Esto sucede porque nos olvidamos de remojar el producto.
Este es un producto universal adecuado para todo tipo de hígado. A algunas personas les da lástima gastar leche en preparar el hígado, pero los costes definitivamente darán sus frutos: nunca has probado un hígado tan tierno y aromático.
Puedes ablandar los despojos sin leche. Para hacer esto, es necesario preparar una solución especial. Para ello, disuelva una cucharada de sal y refresco en agua.
Se asegurará suavidad y ausencia de regusto desagradable.
Algunas amas de casa usan solo refrescos, que también es un método probado y eficaz.