La sopa de guisantes puede considerarse un excelente ejemplo de comida sabrosa y saludable, por lo que es necesario aprender a preparar el plato lo mejor posible.
Con la ayuda de algunos sencillos trucos, el plato quedará original y de gran calidad.
El sabor de la sopa de guisantes en sí puede parecer neutral, por lo que vale la pena realzarlo con especias. Las especias picantes son excelentes opciones.
Lo picante beneficiará a la sopa de guisantes.
Algunos creen que solo las amas de casa perezosas agregan refrescos y deciden no remojar los guisantes durante la noche, como lo exige la tecnología de cocción.
De hecho, se introduce una pizca de refresco para que los guisantes hiervan bien.
No te quedes sólo con las costillas
Mucha gente incluye solo costillas en la receta, pero no hay razón para rechazar la variedad. La ventaja de la sopa de guisantes es que se pueden utilizar salchichas, embutidos y productos ahumados.
Como resultado, el plato se vuelve increíblemente aromático y sabroso.
Seguro que muchos cocineros saben que la mantequilla nunca ha estropeado ni una sola sopa. Esto es cierto. El producto ayudará a mejorar la calidad de la sopa de guisantes.
Sin embargo, debes agregarlo correctamente. Primero, ponemos las zanahorias y las cebollas en una sartén hasta que estén casi completamente cocidas y luego agregamos el aceite.
La sopa quedará increíblemente tierna y sabrosa.
Muchos cocineros experimentados también han oído hablar de este truco. Si agrega un par de cucharadas de jugo de limón a la sopa al final de la cocción y luego la mantiene durante 15 minutos antes de servir, simplemente no reconocerá el plato.